Debería ser lo mismo

Iván Marcano, cabizbajo mientras los futbolistas del Celta celebran el pase a cuartos de final

El miércoles pasado, día de Reyes, tuvimos que soportar las portadas de los diarios deportivos barcelonistas reflejando su infinita indignación por el partido de Copa del Rey que los blaugranas perdieron la noche anterior frente al Sevilla en el Nou Camp (1-2). No sabría decir exactamente de qué periódico se trataba, pero recuerdo un titular que decía: "Mano negra contra el Barça. La presión mediática del Madrid surte efecto". Y es cierto, y estaban en todo su derecho. Preferencias aparte, he de decir que lo de Pérez Burrull ese día fue un poco escandaloso. El gol anulado a Bojan, inexplicable, y el penalti de Chygrynskiy (¿se escribe así?) a Capel aun más, si cabe. La cosa esque el Barça salió derrotado aquél día y, durante los siguientes, pudimos ver en los mismos periódicos, tanto impresos como virtuales, y en los telediarios, la repetición de la jugada un millón de veces, y también pudimos escuchar a todo el mundo hablar de lo injusto que había sido y de lo desgraciado que había sido el Barça. Todo eso, teniendo un partido de vuelta aún por disputar.

Sin embargo, ayer ocurrió algo muy similar, en los últimos instantes y que sí determino una eliminatoria. Ángel se tiró a intentar robarle el balón a Botelho fuera del área y, sin ni siquiera tocarlo, el colegiado Fernández Borbalán no dudó un instante a la hora de señalar los once metros. Así, el Celta de Vigo dejaba fuera de la Copa del Rey al Villarreal y... ¿cuántas veces habremos visto la jugada repetida? ¿una en cada telediario? El mismo Javi Venta señalaba al final del encuentro lo injusta que es la prensa con los equipos más pequeños, mientras que con los grandes el equivocarse parece ser un delito con pena de muerte. Desgraciadamente, no es lo mismo, ni se trata igual a ricos y a pobres. Si no, recordemos también cómo en esta misma campaña doblegó el propio Barça al Espanyol en la jornada 14. De penaltis injustos va la cosa.

Imagen MEDIO TIEMPO

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